En el pueblo de Huaquis, el alba sideral anuncia su llegada desde las primeras luces del día, bendiciendo esta localidad que se yergue en la cima del cerro. El sol, testigo de las múltiples responsabilidades que aguardan a esta comunidad, extiende sus rayos con generosidad, procurando prolongar las horas de luz para satisfacer sus necesidades. Huaquis, conocido también como el ‘Pueblo Fantasma’, es un vestigio milenario que ha resistido el paso del tiempo, conservando su estructura y cultura a pesar del abandono que lo envuelve en la actualidad. Ubicado a seis horas de Lima, este antiguo asentamiento, erigido en el siglo X, fue testigo de la grandeza incaica y la llegada de los conquistadores españoles a América.
El legado de Huaquis se remonta a la época en que los Yauyos, un conglomerado de etnias unidas por la devoción al apu Pariaqaqa, erigieron este centro sobre un acantilado como bastión de resistencia frente a las invasiones y conflictos con pueblos vecinos. Entre los siglos X y XV, este lugar fue el epicentro de una lucha por la supervivencia y la preservación de una identidad cultural única.
Con la expansión del Imperio Inca hacia finales del siglo XV, los Yauyos decidieron integrarse al Tahuantinsuyo para evitar enfrentamientos y preservar su territorio. De esta manera, mantuvieron su autonomía bajo la administración del Inca.
Sin embargo, con la llegada de los españoles en el siglo XVI, se impuso el sistema de reducción indígena liderado por el virrey Francisco Álvarez de Toledo. A pesar de que más de 200 pueblos Yauyos fueron reubicados, Huaquis permaneció habitado y fue reconfigurado como un pueblo colonial. A su estructura original se añadieron una iglesia, un hospital, una prisión y una torre, reflejando la influencia y el dominio de la colonización española en la región.
Aunque Huaquis prevaleció como un centro poblado, durante la época republicana se evidenció un rezago en su desarrollo tecnológico en comparación con otros pueblos vecinos. La falta de acceso al agua y a vías principales marcó la realidad del lugar, llevando a los pobladores a tomar la decisión de fundar un nuevo pueblo entre 1909 y 1919 en una explanada cercana a su antiguo hogar, al que llamaron Miraflores en honor a la Batalla del Pacífico.
Hoy en día, el sitio arqueológico de Huaquis sigue siendo un vínculo vivo con la historia de sus habitantes, atrayendo a cientos de turistas. Los miraflorinos, descendientes de los antiguos Yauyos, mantienen viva la tradición de sus antepasados y se reúnen en festividades como Semana Santa, Fiestas Patrias y San Agustín para rendir homenaje a su legado, siguiendo las costumbres de los antiguos huaquis.
¿Dónde se encuentra Huaquis y cómo llegar?
El sitio arqueológico de Huaquis está ubicado en el distrito de Miraflores, provincia de Yauyos, a unas 6 horas de Lima. Para llegar a este emblemático lugar, primero debes dirigirte al distrito de Miraflores, cuya plaza principal te conducirá directamente al Casco Antiguo de Huaquis.
El recorrido a pie desde Miraflores hasta Huaquis tiene una duración aproximada de una hora y media. Los accesos están en buen estado y el trayecto se considera fácil, lo que permite disfrutar plenamente de este Patrimonio Cultural.
Huaquis: Lugares Emblemáticos
a) Hogares Prehispánicos
Estas viviendas se caracterizan por tener pequeñas ventanas y una puerta de forma rectangular, construidas con piedras que reflejan la arquitectura ancestral del lugar.
b) Cruce de Calles
El pueblo se organiza en cuatro barrios que se entrecruzan a través de dos calles principales, delineando la estructura urbana que ha perdurado a lo largo del tiempo.
c) Prisión
Antiguo sitio de reclusión para curanderos acusados de idolatría, ocasionalmente la iglesia funcionaba como cárcel durante la época de la Santa Inquisición, reflejando un pasado de conflictos y creencias enfrentadas.
d) Escuela
Edificio erigido en la época republicana, donde hombres y mujeres eran educados por separado, reflejando las costumbres de la época en materia de género y educación.
e) Torre y Campanario
Construidos en el siglo XVI sobre un templo preincaico, la torre y el campanario servían como puntos de referencia para convocar a misas y asambleas, fusionando la religión con la vida comunitaria.
f) Hospital
Antiguo centro médico dotado de una cocina para la alimentación de los enfermos, posteriormente utilizado como cementerio, dejando una huella tangible de la atención médica y los ritos funerarios de antaño.
Huaquis: Memoria Colectiva Yauyina
Huaquis, Huamanmarca, Paccha, Huancayahuain, y otros lugares están arraigados en la memoria colectiva de los Yauyinos, quienes perpetúan estas vivencias a través de peregrinaciones, el mantenimiento de acequias, festividades religiosas, competiciones deportivas y celebraciones comunitarias.
Estas expresiones, impregnadas con la lengua y los valores ancestrales, fortalecen el sentido de pertenencia a las comunidades y preservan la identidad cultural de la región a lo largo del tiempo.